martes, 21 de abril de 2009

Mentiras y gordas, de Alfonso Albacete y David Menkes


La repetición, tal como nos enseñara Xavi Puebla en su cortometraje Viernes, puede ser un potente elemento narrativo... de ser usado con talento. Por desgracia, Albacete & Menkes carecen de tal virtud, y hacen de la repetición una rancia y tediosa acumulación de escenas de sexo y drogas sin relevancia narrativa, inoculando el sopor en el espectador. Pareciera que a los directores sólo les interese caldear las hormonas de la muchachada española antes que construir un objeto cinematográfico. A esta incapacidad narrativa, de la que es responsable, por ejemplo, la nueva ministra de cultura, se le une la pobreza de los diálogos, meramente informativos, que además son rara vez inteligibles gracias a la incompetencia vocal de esos que actúan (llamarlos actores es un agravio a los actores). Un montaje que alarga innecesariamente muchas escenas y la fórmula del videoclip como bochornoso y anticuado recurso para crear ritmo, ambiente y tono emocional rematan la larga lista de taras, defectos y momentos ridículos que "exornan" esta memez española (no todas son francesas, ejem).

No hay comentarios:

Publicar un comentario