sábado, 10 de diciembre de 2011

Amanecer, parte I, de Bill Condon


Inopinadamete entretenida durante la primera mitad es justo cuando el argumento (el abrupto embarazo de Bella) dicta el rumbo y la historia enfila las convencionales y hasta ridículas formas (valga de ejemplo la hilarante escena de los lobos parlanchines) de la saga cuando el tedio se adueña del espectador.

No hay comentarios:

Publicar un comentario